LUIS XV EL BIEN AMADO

LUIS XV CON CINCO AÑOS. DE HYACINTHE RIGAUD.
Con apenas 2 años había sido nombrado heredero al trono. Era el superviviente de una epidemia de sarampión y las malas prácticas de un médico, que habían acabado con la mayor parte de su familia,
Su institutriz la duquesa de Ventadour, le había guardado de las salvajes sangrías y purgas que procesaba el mencionado sanador, salvándole con ello, probablemente la vida.
El 12 de Septiembre de 1715, con tan sólo 5 años, inauguró su primera aparición ante la corte y en 1722 recibía la corona tras la regencia de su tío abuelo, Felipe de Orleans

LUIS XV CON 38 AÑOS. MAURICE QUENTIN DE LA TOUR.
Con quince tuvo que casarse con la hija del depuesto Estanislao I de Polonia, Marya Leszczynska, 7 años mayor que él. El primer ministro el duque de Borbón, Monsier le Duc, tenía prisa en cuanto a la descendencia del soberano, pues su muerte hubiera supuesto que fuera coronado su máximo rival el hijo de Felipe de Orleans.
No obstante el poder de le Duc cesaría, cuando esté trató de convencer al rey de que expulsara a su amado tutor el cardenal Andre Herculé de Fleury.
Fleury, a pesar de tener más de 70 años cuando llegó al poder, realizó una serie de habiles reformas que incrementaron el comercio y estabilizaron
la economía. La entrada en la guerra de sucesión austriaca por parte de Francia, que tanto había tratado de evitar Fleury, supuso su dimisión y el fin de su enorme influencia sobre Luis XV. Parecía entonces que a sus 33 años podría entonces el monarca gobernar a su aire, hasta que conoció a la hija de un rico burgués, Madame de Etiolle's, que pasaría a la historia con el nombre de Madame de Pompadour.
































ESCENA DE UNA CACERÍA REAL. Al final la incorporación de Francia a la Guerra de sucesión Austriaca con el objetivo de debilitar a la dinastía Habsburgo fue un enorme error. Llevaron al país a la pérdida de su flota y buena parte de su ejército con todos los desmanes y hambrunas que trajeron la guerra. Además muchas de las colonias de ultramar fueron perdidas a Gran Bretaña. De manera que el "Bien Amado" terminó acumulando tal impopularidad que hubo de ser enterrado en secreto.